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¿Qué encontrarás aquí?
- Albarracin, un lugar donde perderse
- Población y curiosidades
- Localización y Geografía
- Puntos de interés patrimonial de la ciudad
- Visitas guiadas por las calles y edificios históricos
- Red de Museos de la Sierra de Albarracin
- Puntos de interés natural en Albarracin
- Gastronomía y restaurantes en Albarracin, Teruel, Aragón – España
- Alojamientos disponibles: hoteles y casas rurales para todos
- Servicios básicos disponibles
- Economía de la zona a lo largo de los años
- Clima en Albarracin, Teruel, Aragón – España
- Artesanía y forja: productos típicos
- Historia rápida de Albarracín
- Tradiciones y fiestas de la Serranía de Albarracin, Teruel, Aragón – España
Albarracin, un lugar donde perderse
Albarracin (Teruel – Aragón, España) es un pueblo turístico por excelencia lo que le hace recibir a más de 100000 personas al año con ganas de recorrer sus callejuelas y empaparse de la cultura y naturaleza de uno de los pueblos más bonitos de España.
Solo seis municipios de Teruel forman parte de la asociación de pueblos más bonitos de España. Uno de ellos es Albarracín.
Calaceite, Cantavieja, Valderrobles, Puertomingalvo y Rubielos de Mora lo acompañan en esta exclusiva selección.
Población y curiosidades
Comarca: Albarracín
Habitantes: (2007) 1075
Extensión: 452km2
Altitud: 1171m
Accesos: A23, N234, TE-V-9010.
Cuenta con 1049 habitantes (INE 2015).
Es Monumento Nacional desde 1961
Posee la Medalla de Oro al mérito en las Bellas Artes de 1996
Propuesta por la Unesco para ser declarada Patrimonio de la Humanidad por la belleza e importancia de su patrimonio histórico.
La zona apenas alcanza los 5.000 habitantes, lo que la convierte en una de las regiones más despobladas de Europa.
Localización y Geografía

Albarracín es la puerta de entrada a la sierra de su mismo nombre.
Se encuentra a 35 km al noroeste de Teruel, en dirección a Zaragoza.
La comarca de Albarracín es una zona agreste y despoblada, dos características que le otorgan su magia y que enamoran a todo el que la conoce.
En la Serranía hay varios nacimientos de ríos como el Guadalaviar, el Tajo, el Júcar, el Cabriel y el Jiloca y además, el Paisaje protegido de los Pinares de Rodeno se integra en parte de su territorio.
El centro histórico se levanta sobre una montaña rodeada por el río Guadalaviar.
Al norte vemos la sierra de Albarracín, y al sur los montes Universales.
Está prácticamente rodeada por un profundo tajo que hace de foso defensivo, complementado por la muralla que culmina en el castillo del Andador.
Su término municipal es el segundo más grande de la provincia de Teruel, solo Alcañiz le supera en este aspecto.
Incluye las localidades de: Albarracín (capital), Collado de la Grulla, Las Casillas de Bezas, San Pedro y Valdevecar, Valle Cabriel, El Cañigral, El Membrillo.
Puntos de interés patrimonial de la ciudad
La arquitectura de Albarracín ha conservado casi inalterado su carácter medieval.
Lo que le ha valido la fama de ser uno de los pueblos más bonitos de Teruel, España y del mundo.
Los amantes de la arquitectura disfrutarán de lo lindo recorriendo las empinadas y enrevesadas calles del centro, haciendo fotos, visitando sus museos, la Plaza mayor, la Catedral de Albarracin y el Palacio Episcopal.
Albarracín conserva edificios históricos como la Catedral, la iglesia de Santa María, el Palacio Episcopal y mansiones y casas de interés.
La Catedral se culminó en el año 1600 y se levanta en el centro del pueblo.
Es junto con el Palacio Episcopal el edificio histórico más importante y se puede visitar de forma libre o con un guía.
Los centros expositivos de la zona se encuentran agrupados dentro de la Red de Museos de la Comarca de Albarracín.
En la oficina de turismo podrás conseguir algún mapa y varios folletos con información detallada sobre horarios, precios, etc.
La Catedral

Se edificó en el siglo XVI y es una muestra de la importancia que tuvo Albarracín en el pasado.
Junto a la de Teruel es la única que hay en toda la provincia. Ha sido restaurada por la Fundación Santa María durante más de 20 años y en el año 2016 se abrió de nuevo al público para disfrute de turistas y locales.
Es el edificio más emblemático de toda el pueblo de Albarracín.
Además, su restauración ha traído numerosos profesionales de diversos sectores interesados en este magnífico edificio, además de desvelar grandes sorpresas que habían permanecido ocultas.
Museo Diocesano
Este museo abrió sus puertas en el año 1995, siendo el primero de Albarracín.
En la restauración, llevada a cabo por la Escuela Taller, se convirtieron las estancias del obispo en lugares donde mostrar colección de 150 piezas, de las que destaca, sin lugar a dudas, el pez de cristal de roca, un vaso del siglo XVI utilizado para la liturgia y fabricado en un prestigioso taller de Milán.
Por si fuera poco, se pueden contemplar los enormes tapices confeccionados en seda natural en el siglo XVI, la colección de textiles litúrgicos que abarcan desde el siglo XV a comienzos del siglo XX y la sala dedicada a la música religiosa.
Algunos de los rincones que más llaman la atención a los visitantes son los que antiguamente utilizaba el obispo como su despacho o las pinturas que decoraban su capilla privada. Junto a la catedral es uno de los museos más visitados de Albarracín.
Museo de Albarracín
Ubicado en un antiguo hospital, que también fue una cárcel durante la guerra civil, es el mejor punto para entender la historia medieval de la localidad.
Cuenta con tres plantas, la primera aborda en la prehistoria, dónde se dan pinceladas sobre las pinturas rupestres de arte levantino.
La segunda, de mayor importancia exponer todos los elementos de la época medieval y de las distintas culturas que han poblado Albarracín a lo largo de la historia.
Las piezas que verás fueron extraídas de las excavaciones que se hicieron en el castillo y sus inmediaciones en la última.
La colección de cerámica del siglo XI es una de las mejores que se conocen.
En la última planta, se hace un repaso a la historia más reciente de la localidad, más concretamente de los oficios y vestimentas de las sociedades rurales de los siglos XVIII y XIX.
La Julianeta

La Julianeta encabeza el top de edificios más fotografiados en Albarracín dada su pintoresca forma y la curiosa visión que se forma desde el arco que hay enfrente.
Desde el año 2005 es una residencia taller a la que acuden creadores de otras partes del mundo buscando inspiración.
Instituto Aragonés de Fomento adquirió la casa a comienzos de por 150.000€.
Antes vivía en ella Joaquina, la nieta de la Julianeta que fue quien le dio nombre. La restauración corrió a cargo de la Fundación Santa María que sacó de nuevo a la luz los yesos de las paredes y los suelos.
En el año 2014 la Guía Repsol declaró la casa de la Julianeta como mejor rincón de Aragón.
Plaza Mayor del Ayuntamiento
Podría decirse de ella que es el centro geográfico de Albarracín. Además de los diferentes bares y terrazas que hay en la plaza tenemos que destacar dos edificios, por un lado el del Ayuntamiento y por otro, un edificio con un curioso balcón esquinero desde el que empieza la calle del Chorro.
Se estima que el edificio del Ayuntamiento se construyó en el siglo XIV ante una reforma en el siglo XVI le dio la forma actual de U.
En la misma plaza puedes encontrar un mirador dónde puedes ver los jardines del río Guadalaviar.

Torre de Doña Blanca
Es una construcción del siglo XIII levantada para la defensa de Albarracin.
Es una de las construcciones más antiguas que todavía se conservan. Ya en el siglo XVIII cambio Suso para pasar a ser una biblioteca utilizada por la comunidad de dominicos.
Actualmente, reformada por la Fundación Santa María, ejerce como una de las salas de exposiciones más originales de todo el país.
Cuenta con tres salas dónde se han dispuesto las obras de arte, además de un mirador donde observar las vistas que ofrece la Serranía
El Castillo y la Muralla

El Castillo de Albarracin ofrece una vista privilegiada del pueblo que no es posible obtener desde ningún otro.
Aparte de las vistas, todos los restos arqueológicos que se han encontrado han dado varios información sobre la forma de vida de las distintas culturas que han ocupado la villa.
Estuvo abandonado durante muchos años hasta que en el año 1992 lo compró el Gobierno de Aragón.
Las murallas, situadas justo enfrente del castillo y rodeando la ciudad permiten observar Albarracin desde todos sus ángulos y hacerse una idea de su estructura defensiva al observar el entorno en el que se encuentran.
Vale la pena hacer el recorrido completo para darse cuenta de lo difícil que lo tenían los posibles invasores de la ciudad.
Visitas guiadas por las calles y edificios históricos
Una de las cosas que recomendamos es contratar las visitas guiadas por Albarracín. De esta forma conocerás la historia y encontrarás rincones y curiosidades que te harán saborear esta localidad de otra manera.

Tienes varias opciones, aunque te recomendamos que contrates visitas con las dos empresas que ofrecen este servicio, ya que cada una tienes itinerarios diferentes.
Los precios que ofrecen lo permiten. Para más info clica en el nombre de la empresa e irás a su web.
El Andador: Con el andador podrás realizar una visita por las calles de Albarracin, visitando varios edificios y casas de gran interés cultural.
Fundación Santa María: Ofrecen visitas a la Catedral, a los museos y al castillo.
Red de Museos de la Sierra de Albarracin
Museo de Albarracín: Ubicado en un antiguo hospital, es el mejor punto para entender la historia medieval de la localidad.
Museo de la trashumancia (Guadalaviar): Recoge diferentes aspectos en torno al pastoreo y la trashumancia, una actividad muy ligada a toda la Serrania de Albarracin.
Centro de interpretación del acueducto romano (Gea de Albarracín): El acueducto es una sorprendente obra de ingeniería de 25 kilómetros de longitud construida en el siglo I d.C. El centro explica con todo detalle cómo y por qué fue levantado.
Centro de interpretación de Donarque.
Museo de juguetes (Albarracín): La colección privada de un particular es el origen de este museo recomendable para ir con niños. Se sorprenderán seguro al ver los juegos con los que se entretenían sus bisabuelos.
Centro de interpretación Virgen del Tremedal (Orihuela del Tremedal)
Centro de interpretación de la arquitectura tradicional del Parque Cultural de Albarracín (Pozondón): Recupera el valor de la arquitectura popular de la comarca y explica las técnicas y materiales que se usaban de forma tradicional.
Museo de la Forja (Albarracín)
Centro de interpretación Los Secretos del Rodeno (Ródenas): El mejor lugar para comprender el rodeno.
Galería El Molino del Gato (Albarracín)
Centro expositivo de botánica (Calomarde)
Exposición entomológica “La casa de las mariposas” (Griegos)
Exposición de animales disecados (Orihuela del Tremedal)
Mar Nummus – Territorio Dinópolis (Albarracín): Destinado a los más pequeños, este centro de Dinópolis expone fósiles de los seres marinos que vivían en la Serranía de Albarracín cuando todavía estaba cubierta por el agua.
Puntos de interés natural en Albarracin
Una de las mejores cosas de Albarracín, es que permite compaginar el patrimonio y la cultura, con la naturaleza que lo rodea.
Podremos volver a conectar con la naturaleza sin necesidad de alejarnos demasiado del pueblo.
Las dos opciones que os recomendamos son: Visitar Los Pinares de Rodeno y realizar la ruta circular a través del río Guadalaviar.
Pinares de Rodeno
El Pinar de Rodeno es un espacio protegido con un increíble valor natural y cultural, donde podremos disfrutar de la naturaleza practicando varias actividades.

El senderismo o la visita a las pinturas rupestres son dos de las actividades más destacadas de este enclave idílico.
Rio Guadalaviar
Es una ruta circular que rodea la ciudad de Albarracín a través de las orillas del río Guadalaviar.
El recorrido es sencillo y apto para todos los públicos, aunque en algunos tramos el camino es algo pedregoso y si vas con niños es mejor que dejes el carrito en el coche o el hotel.

Gastronomía y restaurantes en Albarracin, Teruel, Aragón – España
La Comarca de Albarracín se ha dedicado a la actividad ganadera durante siglos, por lo que las carnes son uno de los pilares básicos de la cocina de la Zona.
Y dentro de ellas sobresalen dos.
Por un lado el cerdo, que en todo Teruel se ha llegado a producciones altas gracias, entre otras, al jamón de Teruel.
Por otro lado, también se cría y consume cordero, presentado en mil formas y tipos distintos cuando llega a nuestro plato.
Además de éstos, también existe un amplio repertorio de caza y animales de corral como pollos y gallinas.
En cuanto a especies de caza mayor, el ciervo y el jabalí son los más habituales a los que se unen conejos, liebres, perdices y codornices.
El pescado más utilizado en la Serranía ha sido desde siempre el bacalao y la trucha nacida en ríos o torrenteros de la zona.
Otro de los manjares son las setas, que han hecho de Albarracín un destino de primera para los amantes de la micología, que podrán recolectar solicitando el permiso necesario a los agentes forestales.
Hay muchas zonas en la Sierra donde nacen estas delicias, gracias al clima lluvioso, que hace que en otoño surjan de la tierra gran variedad de setas.
Es habitual, según la temporada, encontrarlas en los platos y menús de los restaurantes de la serranía.
Los gaspachos son el plato rey de la Serranía, que se elaboran con “sollapas”, unas tortas muy finas hechas con harina de trigo. A éstas se les añade hígado de cerdo, setas o conejo y pueden hacerse caldosos o tostados, aunque estos últimos son los mejores 🙂
También se les llama galianos, ya que fue un plato típico de los pastores que hacían la trashumancia por la vía Galiana.
Otro plato típico de los pastores que se sigue consumiendo a diario en los restaurantes de la zona son las migas de pastor, normalmente acompañadas por chorizo, melón o uvas.
Alojamientos disponibles: hoteles y casas rurales para todos
La Comarca de Albarracín ofrece atractivos para todo tipo de visitantes: familias, parejas, aventureros o personas que buscan un descanso.
No importa cómo sean tus vacaciones soñadas, pues en Albarracin encontrarás la opción que vas buscando.
Para las familias con niños pequeños, Albarracín es un muy buen destino, ya que combina naturaleza y tranquilidad en una localidad sin coches ni peligros.
Hay una gran variedad de casas rurales donde podrás ir con toda la familia, y un montón de cosas que hacer en Albarracín con niños.
También para las parejas es una gran opción, pues ofrece numerosos lugares y entornos con encanto donde pasar unos días.
Si además os va la aventura, podréis disfrutar de mogollón de actividades como BTT, Rafting, paseos a caballo, escalada o barranquismo.
Reserva unos días en un hotel con encanto o una casa rural bonita y aléjate del ajetreo del día a día.
Si lo que buscas es descansar, también encontrarás alojamientos en medio de la naturaleza donde el único ruido que oirás será el de las ovejas.
Servicios básicos disponibles
Aunque Albarracín es una localidad pequeña con mucho encanto, no se pueden encontrar centros comerciales con cines y miles de tiendas, pero existen tiendas y servicios para pasar unos días tranquilamente.
Cuenta con carnicería, supermercado, farmacia, gasolinera, estanco, panadería, centro de salud, bancos y cajeros automáticos.
Normalmente para compras más grandes la gente suele acudir hasta Teruel dónde hay supermercados más grandes, ya como cualquier ciudad.
Si miras el siguiente contenido verás el mapa con la ubicación de todos los servicios.
Hay un servicio de autobuses con una única línea que comunica Teruel con la Sierra de Albarracín y que circula de Lunes a Sábado (no los Domingos ni festivos).
Sale desde la Estación de Autobuses de Teruel con dirección a Albarracín a las 15,30 horas.
En dirección a Teruel pasa por Albarracín a las 8,30 horas.
Economía de la zona a lo largo de los años
Los sectores económicos que predominan en la Sierra de Albarracín en el año 2017 son principalmente el turismo y la industria maderera.
También se mantienen otros sectores como la ganadería y la agricultura, aunque estos han experimentado un descenso al igual que en el resto del país.
El turismo slow rural o cultural y arquitectónico ha sido un elemento clave en el desarrollo de toda la Serrania.
En los últimos años han sido numerosos los pequeños hoteles y casas rurales que han surgido en la zona.
También empresas de turismo activo ofrecen sus servicios a los turistas más aventureros.
Aún así, en la Sierra de Albarracín podemos hablar de un turismo sostenible sin excesos ni guerras de precios, lo que ayuda a que todos, ciudadanos y turistas sigan disfrutando de los pueblos, ciudades y entornos naturales que ofrece el pueblo y el monte de Albarracín, sin someterse a los problemas que generan las aglomeraciones.
Según Antonio Jiménez, gerente de la Fundación Santa María de Albarracín, “el principal recurso de Albarracín no es el turismo, sino el patrimonio”.
Partiendo de esta premisa, albarracín ha conseguido un equilibrio excelente entre sostenibilidad y turismo.
Otro nicho o sector económico que ha surgido en los últimos años es la escalada en bloque o búlder, una modalidad de escalada sin cuerda que ha puesto Albarracín en el mapa para los miles de aficionados a este deporte en todo el mundo.
Tanto es así, que ya han surgido varios negocios dedicados en exclusiva a este tipo de clientes, abriendo una nueva vía de negocio de turismo deportivo, que tan buenos resultados ha dado en otras ciudades cómo Benasque o Cantabria con el surf.
Gracias a todos estos sectores y el trabajo de mucha gente, Albarracín está consiguiendo frenar la despoblación atrayendo a gente joven que fija su hogar en la zona.
Lamentablemente, esto no ocurre en el resto de la Comarca de Albarracín, que sufre una de las mayores despoblaciones de España.
Antiguamente las principales actividades económicas eran la ganadería, la industria textil, la agricultura y la herrería, además de la extracción forestal.
La industria industria textil llegó a dar trabajo a una gran parte de la población, tejedores, sastres y cardadores trabajaban la lana en bruto que era exportada países como Italia, Holanda o Francia.
Las herrerías también fueron un sector económico próspero, la existencia de hierro en la zona y la abundancia de madera, que servía para combustible, hicieron que esta actividad se desarrollara.
Esta industria fue la más importante de Aragón durante el siglo XVI y XVII.
Respecto a la agricultura, aunque hay plantaciones de trigo y otras variedades, siempre ha representado un sector minoritario comparado con la ganadería.
Normalmente se sembraban cereales para alimentar al ganado y para hacer pan, ya que las panaderías solo las podían encontrar en los pueblos más grandes.
Con todo ello vemos cómo los habitantes de la Sierra de Albarracín se han adaptado al medio a lo largo de la historia, aprovechando y respetando el medio natural para el desarrollo de la zona.
Clima en Albarracin, Teruel, Aragón – España
El clima de la Serranía presenta variaciones debido al terreno irregular con diferentes altitudes y orientaciones.
Podemos diferenciar dos áreas la oriental y la occidental.
Al occidental pertenecen los Montes Universales, caracterizados por un clima frío y húmedo, llegando a nevar en las zonas más elevadas y occidentales.
Las zonas mas lluviosas son la vega del Tajo, Guadalaviar y Griegos.
No es de extrañar que en estas zonas se encuentren los principales nacimientos de ríos como el Tajo, Guadalaviar y Cabriel.
Las temperaturas suelen descender de 0 grados y suele haber heladas durante casi todo el invierno.
En el área oriental disminuye la altitud y las precipitaciones, ya que los vientos procedentes del oeste son más secos al llegar aquí.
Albarracín está situado a 1171 metros sobre el nivel del mar, con un clima mediterráneo de montaña y una temperatura media anual de 11 grados.
Artesanía y forja: productos típicos
Al final de tu visita, nada mejor que llevarte un recuerdo del encanto de Albarracín.
En Albarracín desde la antigüedad se ha trabajado la forja y la cerámica, dos elementos muy presentes en la arquitectura del pueblo.
Podemos distinguir tres formas distintas de trabajar la forja de hierro: cerrajería, rejería y utensilios del hogar y cocina.
La cerrajería incluye picaportes, cerraduras y elementos decorativos de puertas y muebles, que todavía podemos observar por las calles de Albarracin.
La rejería la observaremos en los cierres de balcones, ventanas y puertas, tanto en construcciones civiles como religiosas.
Los siglos XVI, XVIII y XIX fue la mejor época de la rejería de Teruel, con obras de grandes dimensiones y complejidad.
Todavía hoy es habitual encontrar utensilios de cocina fabricados en forja en las casas de los pueblos de la Serranía.
Aunque en la actualidad es difícil encontrar herreros que trabajen de forma tradicional, varios artesanos formados en la escuela-taller ciudad de Albarracín, siguen manteniendo viva la tradición haciendo de ella su medio de vida y de expresión artística.
Respecto a la cerámica, hay varios talleres en la actualidad que se dedican a la cerámica.
Es habitual encontrar piezas en la arquitectura del pueblo, así como en las tiendas donde podrás adquirir algún recuerdo de tu visita.
Y por supuesto no podemos olvidar la deliciosa gastronomía, que te puedes llevar a casa en forma de quesos, jamones, embutidos, patés…
Historia rápida de Albarracín
Recorrer la Serranía de Albarracin, en Teruel, es en cierta forma hacer un viaje en el tiempo.
Y no solo porque su estilo de vida rural y tranquilo se ha conservado hasta hoy.
Tiempos antiguos
Nuestros antepasados prehistóricos ya se dieron cuenta del valor de esta tierra.
Así lo prueban las pinturas rupestres que se encuentran en el Parque Cultural de Albarracín.
Las personas aficionadas a la historia tienen mucho más en lo que recrearse en los pueblos de la Serranía de Albarracín.
El turismo arquitectónico y cultural es una de las principales actividades en Albarracin.
Los romanos también se instalaron aquí y dejaron como legado un acueducto excavado en la roca.
Más tarde los árabes se asentaron en la zona.
De hecho, el nombre de la región se lo dio la tribu de origen bereber de los Banu Razin, que se independizó del Califato de Córdoba.
Albarracín puede decir con orgullo que durante casi un siglo fue un reino taifa independiente.
La población se asentaba en el meandro que configura el río Guadalaviar, en torno al castillo, ocupando el espacio que va desde la Torre de Doña Blanca a la calle de la catedral.
Con la llegada de los almorávides a Al-Andalus, Albarracín pasó a depender del reino de Valencia.
Más adelante, pasó a manos de la familia cristiana de linaje navarro de los Azagra, por cesión.
Éstos hicieron de esta ciudad un Señorío Independiente de Castilla y Aragón desde 1170.
En 1300 pasa a ser parte de la Corona de Aragón después de haber sido conquistada en 1285 por Pedro III de Aragón.
Anteriormente, en 1220, Jaime I fracasó en su intento de conquistarla.
Este pasado de luchas y batallas se ve reflejado todavía en las murallas de la ciudad de Albarracin.
Historia contemporánea
Ya en tiempos modernos, durante la Guerra Civil Española tuvieron lugar numerosos combates entre los ejércitos republicanos y franquistas, cambiando el dominio de la ciudad en varias ocasiones.
En julio de 1937 tuvo lugar un ataque republicano sobre la localidad, constituyendo el mayor enfrentamiento en la localidad durante la guerra.
El 8 de julio los republicanos lograron el control de la ciudad menos el Ayuntamiento y la Catedral, en los que se refugiaron militares y civiles.
Los sublevados enviaron refuerzos y el 13 de julio lograron reconquistar la localidad y expulsar a las tropas republicanas.
Tradiciones y fiestas de la Serranía de Albarracin, Teruel, Aragón – España
A lo largo de la historia muchas fiestas tradicionales han ido desapareciendo mientras que otras han evolucionado con el paso del tiempo.
Muchas de las fiestas se celebraban en julio ya que la lana era una de las riquezas de la comarca y el esquileo coincidía con esta fecha.
Las fiestas de Albarracín se celebran en septiembre.
El día 8 se ofrece un homenaje a la patrona de la localidad Santa María de Albarracin y durante los días que dura la fiesta se celebran encierros verbenas y procesiones.
Otras de las fiestas que se celebran en Albarracín son las hogueras de San Antón, durante la segunda quincena de enero y los Mayos, en el mes de mayo, donde se cantan coplas que exaltan la belleza femenina.
La festividad de San Roque también se celebra en muchos pueblos debido a la devoción que existe hacia este santo en toda la Serranía.
Por supuesto cada pueblo de la Sierra tiene sus propias fiestas. Prácticamente puedes estar todo el verano recorriendo la Sierra de Albarracín a través de las fiestas de los pueblos.
Sí que se conservan en casi todos los pueblos las tradicionales corridas de toros, además, en pueblos como Frías, Albarracín, Orihuela, Guadalaviar y Villar todavía se celebran famosos encierros donde se acompaña a las vacas desde el monte hasta la plaza.